Si le gusta el sabor del ajo, probablemente no requerirá de muchos incentivos para utilizarlo en sus comidas. Para muchos, el ajo es un ingrediente fijo al hacer sofritos, o al preparar salsa para pasta, sopas y estofados. Agregue un poco de ajo machacado a su aderezo para ensalada o para dar un toque extra de sabor, intente hornear dientes de ajo hasta que estén cremosos y espárzalos sobre su pan de preferencia. Aparte de las posibilidades culinarias, el ajo goza de una renombrada reputación por sus beneficios para la salud. Este artículo muestra muchas de las razones médicas para incorporar el ajo en sus comidas y dieta diaria. ¡Pele, machaque y disfrute!
Ajo:
El ajo, uno de los cultivos más antiguos del mundo, es originario de Asia central y ha sido usado como alimento y medicamento por miles de años. […]
El ajo es miembro de la familia <i>allium</i>, la cual incluye a las cebolletas, la cebolla blanca, el puerro y las cebollas. Una variedad de compuestos de azufre le dan al ajo su fuerte aroma y son responsables de muchos de los beneficios saludables del ajo. Adicionalmente, el ajo contiene una gran variedad de nutrientes como el calcio, cobre, manganeso, fósforo, selenio, triptófano y vitaminas B1, B6 y C.
En términos de beneficios para la salud, el ajo es probablemente más conocido por prevenir las enfermedades cardiovasculares al disminuir los niveles de colesterol y triglicéridos y proteger las células sanguíneas y los vasos sanguíneos contra la inflamación y el estrés oxidativo. El ajo también reduce la presión arterial y reduce el riesgo de coágulos sanguíneos. Además, el ajo tiene propiedades antibacterianas y antivirales. Y por último, pero no menos importante, existe evidencia de que el ajo ayuda a prevenir el cáncer y puede ser útil en el tratamiento del cáncer.
Para obtener la mayor cantidad de nutrientes y beneficios para la salud del ajo, compre ajo fresco que se sienta firme al tacto. Si bien algunas tiendas venden paquetes de dientes de ajo pelados, el ajo se vende con mayor frecuencia en bulbos formados por varios dientes pequeños. El bulbo y los clavos están cubiertos con una piel muy fina parecida al papel que es de color blanco, blanquecino o rosado. En casa, guarde los bulbos de ajo en un lugar fresco y oscuro.
El ajo viene disponible en una variedad de formas y también se puede vender en polvo o en gránulos. En años recientes, el ajo negro ha aumentado su popularidad y viene disponible como un producto empaquetado en algunas tiendas de abarrotes o en línea. El ajo negro es fermentado, lo que transforma tanto su textura como su sabor, haciéndolo más suave y dulce. Muchas personas lo consideran mucho más sabroso que el ajo regular.
Reimpreso de Súper Alimentos: El Top Ten de la Naturaleza por Myrna Chandler Goldstein, MA y Mark Allan Goldstein, MD (Simmertown, Tennessee: Books Alive, 2014): p. 18. www.bookpubco.com
