El arte de preparar comida con flores

Agregar flores comestibles y pétalos de colores a sus sopas, ensaladas, frutas y postres invita a la magia en cualquier comida. Su chispeante sabor complementa los ingredientes dulces y picantes y ofrece una sensación de asombro.

¡Devore la flor!

Un día en un almuerzo, a mi hermana le sirvieron un plato de flores.

La había llevado a un restaurante. Ella ordenó.

Ninguna de las das sospechamos que seríamos transportadas a otro mundo.

El pequeño prado que tenía ante ella estaba hecho de tréboles, hierbas, pétalos de rosa y violas.

¡Violas!

¿Habíamos entrado en un reino de hadas que se hacía pasar por un restaurante?

¿El camarero la confundió con la realeza y le cedió el plato de la reina?

Contuve el aliento cuando el camarero apareció con una pequeña jarra blanca y vertió en el plato un néctar rubí: de tomates, pimientos, pepinos, y ajo.

Él debe haber dicho: “¡Admirad!” No puedo estar segura, pero ¿qué otra cosa podría haber dicho?

Él acababa de servirle a mi hermana un bol de fleurs por el amor de Dios. ¿O era un gazpacho con floras? Volví a mirar el menú. Las palabras estaban en inglês, no en élfico. No había ninguna referencia a las flores.

La vi tomar el primer bocado.

Como lo sospechaba, tenía un sabor hermoso.

Desde ese momento, la posibilidad mágica de agregar flores a las comidas se arraigó en mi ser (floreció, fructificó, entienden lo que quiero decir).

Durante miles de años, y definitivamente desde la Edad Media, las flores se han utilizado en las comidas. Sin embargo, en esta época, no encuentran a menudo en su plato de cenar flores o pétalos, ya sea en restaurantes o en casa.

Entonces, ¿por qué no darle un reinicio a esta antigua práctica?

No solo para agregar con las flores comestibles un sabor chispeante a la lechuga y las ensaladas de frutas, postres y platos principales, sino también porque las flores añaden vitaminas como la vitamina C. Tal vez no en grandes cantidades. Después de todo, no es que vamos a formular una píldora farmacéutica de violas. Más bien, lo que queremos, y siempre hemos querido, es una porción diaria del Edén. Lo que necesitamos es la belleza y la gloria de las flores celestiales que nos guiñan un ojo desde nuestro plato de ensalada y desde nuestra cena.

Antes de comenzar, y en caso de que no planeen leer mucho más, solo tengan en cuenta que: Devoren solo las flores que se conocen como comestibles, orgánicas y libres de pesticidas. Y: Muchas flores que podemos comer, nuestras mascotas no pueden. La siguiente lista no es exhaustiva. Es posible que existan otras variedades comestibles que las que se ofrecen aquí, pero estas son seguras y sanas, con esta precaución: aunque les guste saber que los pétalos de rosa son comestibles, no coman ninguna que provenga de un florista. Pueden cultivarlas ustedes mismos o seleccionar las que provengan de un origen garantizado. Recuerden quitar los estambres de sus flores (excepto en las violas) junto con el “talón” blanco en la parte inferior del pétalo, ya que ambos pueden ser amargos y arruinarle la onda a su plato.

Devorar la imagen de contenido de la flor

Una lista para comenzar:

Rosas, rosas, rosas. ¿Sabían que los pétalos de diferentes colores tienen diferentes sabores? Si una rosa no tiene olor, los pétalos no tendrán sabor. He saboreado las rosas coral pimienta que crecen en mi terraza, pero ahora me pregunto a qué sabrán los pétalos de rosa amarilla, púrpura y blanca. Hummm...

Los pétalos de rosa se pueden esparcir sobre cualquier cosa y se encuentran flotando en bebidas frías y adornando pasteles y frutas.

Es sentido común, pero en caso de que se lo pregunten, eviten los pétalos con puntos negros o amarillos.

Los claveles en miniaturadianthus, tienen un sabor algo parecido a los clavos. Estos son tóxicos para las mascotas domésticas, por lo que no compartan su asado de tofu adornado con el dianthus con su perro siempre hambriento y dispuesto a probar cualquier cosa. También son adiciones hermosas para ensaladas y postres.

Alliums, o cebollas en flor, vienen en más de 400 variedades. Algunas fuentes dicen que hay 800 variedades, pero cualquier número por encima de 400 es simplemente increíble. Estas hermosas florecillas moradas y azules, que las abejas adoran, agregan un saborcillo de ajo a las ensaladas, ¡así que a espolvoréala, mi amigo!

Violas. ¡Pueden comerse toda la flor! Se suelen utilizar para decorar postres. Póngalos a flotar en su sopa. Adornen su ensalada con coronas de violas. No sean tímidos. Sus encantadoras y bigotudas caras son demasiado perfectas para ignorarlas.

Claveles de las Indias. Estas flores, que florecen durante todo el verano, no sólo repelen las plagas de su jardín orgánico, sino que también se pueden cultivar fácilmente en macetas. Los antiguos griegos y aztecas utilizaban estos claveles como medicina y alimento. Como el azafrán, los claveles de las indias agregan un color brillante a los platos y ensaladas. Sus diferentes variedades van desde un sabor más picante a uno más cítrico. Similar a las caléndulas, los claveles de las indias a menudo se confunden con la misma. Ésta también se puede cultivar y esparcir abundantemente sobre su comida.

Capuchinas. Tropaeolum. El sabor similar a rábano de esta flor, favorita del jardín, tiene una variedad de colores, desde el naranja hasta al rojo y el amarillo. Las flores más pequeñas son más sabrosas y se pueden usar en aderezos, rasgándolas o picándolas. Pueden utilizarlas salteadas en pastas y ensaladas. También pueden agregar sus hojas o quitarlas del tallo y enrollarlas alrededor de una porción de queso de cabra con hierbas. Para mis amigos veganos, el queso de nuez también funciona bien. Algunos nutricionistas sugieren que si está embarazada, es mejor evitarlas. De lo contrario, utilice todas las que quiera mientras pueda.

Cocinar, adornar, o rociar las flores y pétalos que hacen parte de esta lista va a encantar a su familia e invitados cuando se sientan en su mesa. ¡Disfruten el proceso, háganlo parte de su práctica y sigan comiendo!

Pruebe nuestros Tamales de flor de hibisco con salsa de chile rojo y deguste unos tamales rellenos de flores repletos de energía.

Los pétalos de rosa espolvoreados en un postre le dan un toque de elegancia. Nuestros Bocaditos de bizcocho de pistacho y cardamomo con glaseado de castañas de cajú y rosas convierten una sencilla reunión en una gala.

-K para el Veggie Fest Equipo

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